Estos días previos a la Navidad, a veces me detengo ante los escaparates de las tiendas de juguetes - como cuando era un niño -, en especial las de maquetas, y contemplo los modelos de barcos y aviones. Hoy, paseando con Puck por el parque, disponiéndome a ir a depositar una cajita de cartón de unos zapatos en el contenedor de papeles, y teniendo en mente los modelos de barcos, he pensado que sería de una gran ayuda para sujetar el costillaje del casco de un barco a escala, trabajando con materiales flexibles y colas. Quizás lo ponga en práctica.